viernes, 30 de octubre de 2009

Mata a mi madre, pero por favor, no me mates a mí.



I may be stupid

I used to be the person

I used to live like a child

To understand my only illusion

I undertand the reason why

I give you my world

But you just want to kill me

It's not only love

No no no it's me baby

It's me what you'r looking for

Please stop killing me

I give you a world

I give you everything i have

I give you everything you need

It's only love

Don't kill me





lunes, 12 de octubre de 2009

Octubre. Primavera. Tormenta.
Ya faltan dos puchitos y se termina el 2009.
Y ya son 10 años de aquel mítico fin-de-año 1999, ante la llegada de un nuevo milenio. El miedo de lo que no iba a venir, la emoción de una fecha más que lo único que cambia son los primeros números del calendario.
¿Qué hemos hecho en esta década? La década de la nada, de los ceros.
Aunque insisto, el tiempo para mi no "existe", consecuentemente el tipo de organización de los días, los años, las décadas, me parece que tiene una influencia superflua sobre los hechos. Más aún recordando que son dos-mil-diez años que nació alguien (nunca sabremos si vivió verdaderamente, ni mucho menos si nació en esa fecha) al quien rinde culto una religión que yo no profeso.
Retomando el tema, se acerca fin de año y la gente hace balances, mira con esperanza al futuro y siempre dice lo mismo:"Paz y prosperidad".
Analicemos... Bueno, la paz ya sabemos que no la tenemos. No sólo el acto de violencia física en sí, la propaganda invasiva, la violencia verbal, la violencia sonora, indica la falta de pa; los conflictos en medio oriente, en américa latina, en todo el mundo; el premio nobel de la paz a un presidente de un país que vende armas es la frutillita de la torta, la fruta abrillantada del pan dulce navideño.
Ahora veamos qué queremos decir cuando decimos Prosperidad. ¿Acaso prosperidad financiera, o éxito ecónomico? Es similar a la discusión "qué-es-la-felicidad". Yo a la "prosperidad" no la relaciono con cosas buenas. En nombre de la prosperidad del país nos han hundido en el peor fango neoliberal. En vez de augurar prosperidad en el futuro, por qué no hacemos al hoy, por qué no somos felices con el hoy, con lo que tenemos. Mañana se verá, y será lo que será, o lo que hagamos para que sea.
En fin... terminaremos estas fiestas cantando como Violencia Rivas...

miércoles, 7 de octubre de 2009

baires, ciudad de contrastes



Ciudad de
negro y blanco
de ying y yang
de valentía y de indiferencia
de bombo y de oro
de debate y de ignorancia
de cafetin y starbucks
de tango y de reggaeton
de inglés y de lunfardo
de camiseta de boca y de camisa de dior
de los zapatos italianos de cuero argentino
de los descalzos
de los que lustran
de los que cantan, de los que bailan
de la voz que no se oyó;
y los pies
clap clap clap
y los cuerpos
tap tap tap
avanzan por florida, avasallantes
no miran
no oyen
sólo avanzan;
Ciudad de blanco, de negro, de gris cemento.
Ahora somos todos invisibles.